Publicado también en Boletín de Resúmenes del CLAD, Vol. 4 No. 3 (Mar. 88)

Este documento fue presentado al Coloquio Internacional sobre Gerencia de Programas Sociales Masivos, realizado en Argentina, en noviembre de 1987. En él se hace un análisis teórico de las condiciones que determinan la situación de salud en un país, con referencias específicas a la realidad panameña. Para analizar el tema de la salud comunitaria es necesario hacer referencia a un concepto básico que es el de población humana ya que es allí donde un sistema de salud inserta su responsabilidad. La población humana es una totalidad dinámica, en permanente desarrollo, formada por seres humanos, en donde cada persona constituye su propio proceso unitario. El concepto de población representa la interacción de dos procesos, uno colectivo y uno individual; tanto el ente colectivo como el individual son dos totalidades en movimiento que están determinadas por un conjunto de factores que condicionan ese movimiento: biológicos, sociales, económicos y políticos. El programa biológico de cada individuo y de la población en su conjunto no lo hacemos nosotros, pero sí establecemos las condiciones para que dicho programa se realice o no realice, y esas son las condiciones socio-económicas y políticas que van a configurar el medio ambiente para que el programa biológico se desarrolle. Es en este contexto que debe analizarse la forma en que una comunidad se organiza para producir sus condiciones de salud. Las Naciones Unidas señalan que "el desarrollo de una comunidad es el proceso por el cual el propio pueblo participa en la planificación y en la realización de programas que se destinan a elevar su nivel de vida"; y la salud es una de las áreas donde esos programas deben implementarse. La responsabilidad de los gobiernos radica, por lo tanto, en el hecho de propiciar legislaciones que faciliten acciones de organización participativa. La salud, reconocida como un derecho, obliga al grupo técnico a trabajar integrándose a la realidad de cada una de las comunidades. Sobre la base de esta concepción básica, en Panamá se definió, en 1969, el programa único de salud para la población, integrado en cinco capítulos: materno-infantil; salud del adulto; sanidad del medio; organización y educación de la comunidad; y administración de los recursos de salud del pueblo. El sistema estatal se estructura, para la atención de la salud comunitaria, en tres niveles: atención primaria, atención hospitalaria regional; y atención en hospitales nacionales especializados. Un elemento central de la política de salud que orienta estos programas es el trabajo en equipo, considerado como indispensable en la medicina comunitaria, al cual se integra la población objeto de los programas. Las normas básicas que deben regir la salud comunitaria, en contraste con las normas de salud tradicionales, son las siguientes: medicina fundamentada en la salud (preventiva); énfasis conceptual en las causas de la enfermedad; factores sociales como elemento central de la etiología; servicio médico para todos; programas de salud integrados con otros programas de bienestar social; regionalización de los servicios de salud; atención médica ofrecida por un equipo de salud; y el médico es de la familia y de la comunidad; la atención médica es sectorizada; y se realiza con participación de la comunidad. S.S.

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