Se examina la gestión del Parlamento, considerado como uno de los órganos más importantes y tradicionales de la democracia, en el marco del Programa Regional de Naciones Unidas de Reforma del Estado, con el apoyo del CLAD. Se describen las funciones del Parlamento, su organización y funcionamiento, presupuesto, procesos decisorios, régimen de personal, infraestructura física y apoyo informático y documental.El capítulo introductorio reseña la historia de los parlamentos y sus roles. Entre éstos se señalan los siguientes: legislar; controlar; aprobar tratados internacionales; intervenir en la designación, renuncia o remoción de funcionarios superiores; investigar, encuestar e inspeccionar; ser escenario de la oposición y caja de resonancia de la opinión pública; representar y participar; procurar, mediar y concertar; debatir; y constituirse en residencia de la clase política e imagen de la democracia.Los capítulos siguientes se refieren a la gestión parlamentaria, haciendo referencia a las fuentes normativas, constitucionales, legislativas y reglamentarias. Se consideran los órganos de gobierno de las Cámaras, en relación con la preponderancia del presidente, de la mesa y el ejercicio conjunto de competencias. Se estudian los órganos de administración del Parlamento, de acuerdo con los sistemas unitario, binario, trinitario y colegiado. El capítulo quinto concierne al régimen de personal, describiendo las normas que lo rigen, el personal permanente y transitorio, y las jubilaciones y pensiones del personal.El capítulo sexto se aboca al análisis del apoyo informativo y documental, incluyendo publicaciones, sistema informático y banco de datos, biblioteca y archivos, e imprenta. El capítulo siguiente describe la estructura física, y el capítulo octavo aborda el procedimiento para la toma de decisiones en sistemas unicamerales y bicamerales. En el capítulo noveno se comentan las relaciones del Parlamento con otros organismos y con la sociedad, y en el capítulo décimo se discuten las cuestiones presupuestarias, haciendo referencia al caso argentino.El capítulo final presenta las conclusiones y recomendaciones del estudio. Se destaca la importancia de revitalizar el liderazgo institucional de los parlamentos y permitir que los mismos cumplan eficazmente con los roles que les corresponden. Para ello se requiere la implementación de reformas electorales, en el funcionamiento de los partidos políticos y en el sistema educativo, que faciliten una mayor representación y capacitación del personal que accede a los parlamentos.Se plantea la conveniencia de disponer de códigos de ética, de racionalizar los servicios administrativos de apoyo, y de crear una red informática internacional que conecte a los parlamentos y permita un mejor intercambio de información. Asimismo, se recomienda preservar la independencia de los parlamentos actualizando la legislación sobre sus prerrogativas e inmunidades, regular el funcionamiento de los lobbies, y mejorar los mecanismos de control político, administrativo y financiero. C.S./M.T.

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