El Inap posee la versión aparecida en el Seminario Internacional Descentralización del Estado. Requerimientos y Políticas en la Crisis, Bs.As. 1988.

Publicado también en Boletín de Resúmenes del CLAD, Vol. 5 No. 2 (Dic. 88)

El documento contiene una de las ponencias presentadas al coloquio internacional "La Reforma del Estado: Desafío para la Democracia". En la ponencia se desarrollan los siguientes temas: la crisis de la planificación; la articulación entre el estado y la región; el itinerario de la construcción social regional; estado y dominación regional; y la construcción social regional: ingeniería social utópica? En el documento se plantea una hipótesis central en la que se destaca que la descentralización político-territorial en América Latina aparece, hoy en día, como una utopía posible debido a la confluencia de fuerzas descentralizadoras incorporadas tanto a la fase actual del desarrollo industrial como a la demanda social y política de entidades subnacionales que reclaman mayores espacios de autorealización. Si esta hipótesis es correcta, se plantea un desafío que apunta a la necesidad de "construir" política y socialmente las regiones para permitirles hacer uso democrático y eficiente del poder. Las condiciones actuales del continente favorecen la descentralización y dan origen a una trilogía inseparable entre descentralización, desarrollo regional y planificación concertada. Ciertamente, la planificación enfrenta actualmente una crisis y la superación de dicha crisis contiene un triple desafío: una reconstrucción teórica de la planificación regional, la reinserción del proceso de planificación en la matriz del poder y la recuperación del carácter humanista de la planificación; este triple desafío apunta, a su vez, a la transformación de las regiones de "objetos" en "sujetos" de su propio desarrollo. Para alcanzar este propósito es necesaria la descentralización, esto es, la cesión de poder político del estado a las regiones. Todo ello tiene, obviamente, consecuencias concretas para el proceso y las estrategias de desarrollo y de planificación regional. Estas ideas centrales proporcionan el contexto en el cual debe desarrollarse el proceso de "construcción social regional"; este proceso está fuertemente ligado al papel de los agentes, de las instituciones y de los valores colectivos los que condicionarán dicha construcción. La comprensión cabal de este proceso requiere, a su vez, conocer las estructuras inter-regionales de dominación, cuya ruptura se entiende como una de las tareas principales del proyecto político regional. Una de las preguntas clave que es necesario plantearse, es en qué medida la construcción social regional constituye o no una ingeniería social utópica. Una pregunta de este tipo llama la atención hacia el peligro del voluntarismo y permite desentrañar los escollos adicionales que impiden el logro de la concertación social y política al interior de las regiones. A su vez, destaca el papel esencial que pueden jugar, potencialmente, ciertas instituciones que estarían en condiciones de generar elementos de concertación y de sinergia social. Lo esencial, cuando se plantea la problemática de las regiones, es colocar nuevamente al hombre en el centro de los procesos de desarrollo y colocar al territorio regional al servicio del hombre. Para lograrlo, la construcción social regional deberá oscilar entre objetivos de micro y de macro escala. S.S.

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