El estudio, presentado en el Seminario sobre Desarrollo Curricular para la Capacitación de Gerentes de Empresas Públicas Industriales, constituye un fundamento de los efectos que en el desempeño gerencial tienen los factores psicológicos; a partir de dicho fundamento se vincula la teoría psicológica con los programas de formación gerencial y se propone un contenido curricular. Las relaciones entre teoría psicológica-organizacional y capacitación se establecen a partir del marco teórico funcionalista, procurando mantener una estrecha relación entre teoría y práctica. Se parte, además del supuesto que las Empresas Públicas Industriales (EPI) tienen una doble inserción en la realidad: en la burocracia estatal y en el sistema tecnológico que adoptan. Después de un detallado análisis de las teorías de la personalidad, de la motivación, de la decisión y del liderazgo, aplicadas a las EPI, se elabora un perfil al cual debería responder un gerente de dichas empresas y del perfil se deduce una proposición de contenido curricular: 1) El gerente de las EPI condiciona el desarrollo de la personalidad de sus empleados al interior de la empresa y, en tanto actor, es un agente de permanencia del sistema más que de cambio. A partir de estos principios, la formación gerencial debe orientarse a transformarlo en factor de desarrollo tanto de la personalidad como de la eficiencia del personal a su mando; 2) Para que el gerente logre transformarse en efectivo agente motivador deben darse algunas condiciones organizacionales: metas alcanzables, normas claramente establecidas, recompensa adecuada al desempeño. Para lograr esto un programa de capacitación debe contener elementos que enseñen al gerente a motivar, incentivar y desarrollar la cohesión de grupo; 3) El gerente de las EPI decide en un contexto de incertidumbre e influído por procesos político-burocráticos. Esto conduce a la necesidad de incluír en su formación la teoría del proceso decisorio; 4) El gerente, en tanto líder de las EPI, debe ser reconocido y legitimado como tal. Esto justifica introducir en su formación la teoría del liderazgo, del comportamiento grupal, la dinámica de grupo, la dinámica del poder y el manejo de los conflictos. Este contenido curricular debe ser desarrollado evitando supuestos simplistas en el sentido de esperar que con la asistencia a un programa de este tipo el gerente estará en condiciones de introducir modificaciones substanciales en la organización. El contenido curricular propuesto parte más bien del supuesto que la complejidad del sistema psico-organizacional es un factor determinante que los gerentes de las EPI deben considerar para lograr una adecuada gestión. Los esquemas propuestos proveen al gerente de un marco organizador útil a su función pero que debe adaptar en forma dinámica a la realidad de la empresa específica en que debe actuar. A.Q.

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