Recopilación de un conjunto de trabajos, análisis e investigaciones realizados por el autor como director del Centro de Estudios, que tiene por objetivo aportar elementos de juicio para la elaboración de diagnósticos y de las políticas necesarias para resolver la cuestión militar argentina. Señala que desde el ángulo político-ideológico, tales análisis adquieren el carácter de una muestra analítica relativa a la cuestión militar desde una perspectiva "neo-conservadora", como contraste a la perspectiva de izquierda o de centro-izquierda que ha predominado en la literatura técnica o científica sobre la problemática militar. Trata las siguientes cuestiones: la situación estratégico-militar de la Argentina, el factor militar en el conflicto de las Malvinas, la relación de fuerzas con Chile y Brasil, las relaciones militares con los EE.UU., el problema de la subversión, la ley de defensa, la obediencia debida y la amnistía, las crisis militares, el rol político de las fuerzas armadas, la imagen de las fuerzas armadas, las fuerzas armadas en la prensa, las variables del conflicto militar. Concluye señalando que las variables que determinaron el conflicto militar argentino al finalizar la década del 80, requieren una solución en el marco del replanteo general de la política militar. El reestablecimiento de la cohesión dentro del Ejército aparece como un requisito para la plena vigencia de la disciplina. Alfonsín pretendía que la civilidad no se ocupara de qué pensaban los "generales", pero los hechos hicieron que la opinión pública terminara preocupada por el pensamiento de los "capitanes", produciendo así un efecto inverso al buscado. La política que buscó impedir el surgimiento de líderes dentro del Ejército terminó en una suerte de anarquía, donde los niveles intermedios, y aun subalternos, se transformaron en puntos de referencia alternativos a las jerarquías formales. Resuelto este problema, queda para los primeros años de la década del 90 el desafío de articular un sistema militar eficiente con un presupuesto compatible con el estado de la economía argentina. Muchas son las cuestiones que será necesario estudiar y resolver para que la Argentina cuente con Fuerzas Armadas adecuadas para el proyecto de transformación y crecimiento que el país requiere con urgencia. Ante todo se requerirá una drástica reducción de las empresas militares, que concentran la tercera parte del gasto militar. Asimismo, será necesario racionalizar las instalaciones y funciones, coordinar las fuerzas de tareas y las actividades logísticas, establecer un sistema efectivo de planeamiento y conducción conjunta, modificar las políticas de personal (ascensos, retiros, calificaciones) que hacen de la antiguedad una suerte de grado y a la vez de concepto ético, incorporar nítidamente a las fuerzas de seguridad al sistema de Defensa Nacional, y constituir un sistema de reservas activas, entre muchas otras cuestiones pendientes.

Español