Trabajo referido a las estructuras organizativas de la Administración Pública Nacional, que tiene por objetivo exponer criterios y lineamientos para la formulación de programas de redimensionamiento de la administración pública, analizando las implicancias económico-financieras derivadas de la aplicación de dichos programas. Trata los siguientes aspectos: dimensiones y estructuras del sector público central, estructuración y funcionamiento de las nuevas organizaciones, impacto del cambio en los planteles y en los recursos humanos, implicancias económico-financieras del redimensionamiento organizacional y diseño de un plan de trabajo y cronograma de acción para 1988. La administración pública, como parte integrante del estado, ha estado sometida a raíz de los avatares políticos, sociales, económicos, culturales, etc., que en los últimos tiempos vivió la Argentina, a una inercia y parálisis tal, que hoy nadie duda que sus logros han decrecido aún respecto de un pasado muy lejano. Este atraso relativo, generado por restrictivas políticas en materia de inversión y gasto público, le ha impedido a la administración pública acceder en su momento a los modernos sistemas y tecnologías de gestión administrativa, provocando al conjunto de decisores políticos dificultades, obstáculos e impedimentos para una efectiva acción de gobierno. Una habitual creencia es que la solución de los referidos problemas depende de la modificación de conductas individuales de los funcionarios públicos por un lado y de la modernización administrativa por el otro. Frente a esta postura, sostiene que si bien el cambio de actitud o el factor modernización son elementos importantes, las soluciones sólo pueden operar en tanto se opere un profundo cambio en el modelo global: de la gestión por normas a la gestión por resultados. El cambio en el modelo de gestión también va asociado al reconocimiento de la especificidad y su adecuado tratamiento por vía de la autonomía organizacional. En lugar de seguir aplicando el viejo esquema de la gestión normativa, cuya pretensión principal es el control absoluto e indiferenciado del sector público, la idea para el nuevo modelo de gestión por resultados es acordar con cada organización pública sus objetivos y metas, el volumen de recursos necesarios para alcanzarlos y el correspondiente programa de actividades. Con base en estos lineamientos diseña un programa, en el que se combinan las reformas globales, con las sectoriales en ciertos organismos públicos específicos; los resultados a corto plazo, con otros que los vayan encadenando en acciones de mediano y largo plazo; la formación de una clara inteligencia formuladora de propuestas, con la amplia participación de los diferentes sectores sociales interesados en los temas públicos; la utilización de tecnologías administrativas, dentro de programas más abarcativos de transformación de la cultura organizacional. Concluye en que todo plan de reforma administrativa debe formularse con el involucramiento de las principales fuerzas políticas y sociales interactuantes, garantizando de esta manera la continuidad de grandes líneas de política administrativa, las que ejecutadas por estructuras organizativas altamente profesionalizadas, permitirán alcanzar los objetivos de la transformación. BINAP8555

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