En La teoría política de "El Federalista", David F. Epstein analiza los principios políticos que, según esos defensores de la Constitución, debían cristalizarse en el nuevo gobierno de Estados Unidos. Epstein destaca la claridad de "El Federalista", y muestra cómo y por qué el régimen norteamericano combina los principios liberal y republicano. Mientras interpretaciones anteriores han subrayado la discusión encarada por "El Federalista" acerca de los intereses económicos públicos y privados, Epstein describe la importancia concedida a los impulsos políticos inherentes a la naturaleza humana -el amor a la fama, el ambicioso amor al poder, la apasionada adhesión a las propias opiniones-. que animan y justifican la existencia de un gobierno "estrictamente republicano".
De este modo, La teoría política de "El Federalista", constituye una guía particularmente valiosa para los politicólogos, historiadores y otros estudiosos que deseen reflexionar sobre el carácter de las instituciones norteamericanas. La obra de Epstein ilumina muchos de los temas más importantes del pensamiento político norteamericano, entre ellos, el sentido práctico del "consentimiento" como origen de gobierno, el modo de reconciliar el gobierno limitado con la necesidad de poderes ilimitados, la relación entre los derechos privados y el bien público, la naturaleza del federalismo y de la representación y separación de los poderes, y el modo en que un poder ejecutivo enérgico y un judicial independiente pueden respaldarse en la seguridad de un senado estable.