Se tratan las principales materias de carácter estratégico que han significado un cambio sustancial y transversal en la organización y funcionamiento del Estado en Chile, desarrolladas por los gobiernos democráticos a partir de 1990, las que dan cuenta de los avances y cambios realizados por autoridades, directivos y funcionarios para mejorar la capacidad y la calidad de la gestión de los servicios e instituciones públicas.A mediados de la última década del siglo XX, gran parte de los gobiernos de los países de América Latina, reconociendo el importante rol que juegan los procesos de modernización de la gestión pública en el desarrollo de la democracia, la gobernabilidad y el fortalecimiento de las políticas públicas, impulsaron iniciativas destinadas a mejorar y modernizar el funcionamiento de las instituciones públicas, poniendo como eje de los cambios a los ciudadanos - usuarios, e instalando instrumentos y metodologías que fortalecen la eficiencia, eficacia transparencia y calidad de la gestión pública.En marzo de 2000 se puso en marcha el Proyecto de Reforma y Modernización del Estado, dependiente del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, el que ha desarrollado su acción a partir de un eje ordenador consistente en la estructuración de un "Estado al servicio del ciudadano". Para ello, debe contar con una estructura flexible que permita que el rediseño y reorganización del aparato público se desarrolle con fluidez, y con una gestión eficiente, participativa y transparente que dé cuenta de las exigencias ciudadanas, el desarrollo económico y la globalización.Se tratan los principales avances que se refieren a la creación de la Dirección Nacional del Servicio Civil y el Sistema de Alta Dirección Pública, Finanzas Públicas, la Ley sobre Bases de los Procedimientos Administrativos que rigen los Actos de los Organos de la Administración del Estado, el Sistema de Compras y Contrataciones Públicas, Gobierno Electrónico, Transparencia y derechos ciudadanos, Descentralización.Actualmente, la reforma del Estado se encuentra en su etapa de consolidación, y la modernización de la gestión pública está estrechamente vinculada al concepto de calidad. Para la Presidenta de la República Michelle Bachelet, la tarea central de la agenda de la reforma del Estado es precisamente elevar la calidad de los servicios públicos y los cuatro ejes de su gobierno son: protección social, educación, calidad de vida e innovación y emprendimiento.Junto con valorar y cuidar los logros alcanzados, es necesario evitar el riesgo de la complacencia y hacerse cargo de objetivos de desarrollo humano, que junto con mejorar el bienestar material de toda la población, aumenten el nivel de calidad de vida individual y colectiva, y fortalezcan el sentido de pertenencia a una nación libre, justa y solidaria, en la que nuevos sueños y desafíos, interpreten los anhelos más profundos de todas y todos los chilenos.

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