Alinearlas asignaciones presupuestales con las prioridades de política de un gobierno, realizar procesos de reasignación inter e intrasectoriales teniendo en cuenta el desempeño de los diferentes programas, así como generar información sobre los costos reales de las políticas son uno de los grandes desafíos que enfrenta los países latinoamericanos.Para ello se hace necesario repensar la relación plan-programación de inversiones-programación presupuestaria-proyectos teniendo en consideración no sólo la dimensión técnica, administrativa y financiera sino también los aspectos políticos e institucionales del proceso.La complejidad y diferenciación institucional del aparato estatal responsable de las políticas y la multiplicidad de actores que entran en juego en la gestión de los recursos financieros inciden en la definición de los principales problemas de articulación y coordinación de políticas y, por ende, en las posibles soluciones.Cómo articular institucionalmente las metas presidenciales con la planificación estratégica y la orientación del gasto público nos conduce a considerar un nuevo esquema institucional de fuerte conducción y coordinación política, fortalecer la administración técnica de los ministerios, sin menoscabar el control ciudadano para el fomento del bien público.

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