Es así como debe librarse una batalla contra la pobreza, que debe gestarse desde el corazón de todos y cada uno de los nacionales de un país, es decir, no solo a los pobres les afecta la pobreza, toda la sociedad se ve marcada por este fenómeno. Es así como debe propiciarse a un debido cambio de paradigmas, para lograr acabar con las barreras que el capitalismo le impone al hombre.Cómo rompemos esas barreras, la verdad es que el camino no es fácil, pues requiere de un profundo cambio a todo nivel, requiere de una verdadera revolución desde los mas profundos cimientos hasta la cúspide mas alta de un país; para alcanzar esto es necesario transformar al Estado para propiciar un crecimiento económico sustentable, es necesario disminuir al máximo la corrupción administrativa para así lograr una gerencia eficaz y transparente del Estado, igualmente se debe disminuir la inflación y estabilizar la moneda para que las personas puedan tener capacidad adquisitiva en el tiempo y no se vean diezmados en su aptitud para satisfacer necesidades por las constantes devaluaciones de la moneda, se necesita transformar el Estado para que deje de ser protector de intereses particulares de grupos privilegiados para convertirse en un Estado que propicie la participación de nuevos productores, que les de garantías a esos productores con normativas claras y transparentes igualmente el Estado debe virar su mirada hacia la masa desempleada y se deben generar empleos, pues una de las preocupaciones más importantes debe ser precisamente ese conglomerado de ciudadanos. La educación también debe ser un punto focal en la acción del Estado, ya que educando a los pobres se les da mayores oportunidades de conseguir empleos, tan es así que las personas que no poseen educación básica son más propensas a caer en situación de pobreza extrema.Con la educación y la capacitación se deben perseguir los objetivos de proveer más empleabilidad y competencias a la fuerza de trabajo. Las estrategias de promoción de empleo, deben enfatizar el rol determinante que las políticas de desarrollo de los recursos humanos ejercen sobre ella; el incremento del capital humano, constituye la verdadera riqueza de una sociedad. Ello supone que las inversiones que el país debe hacer en el combate del desempleo no pueden estar divorciadas de la educación y capacitación permanente; ahora bien, ¿cuánto y cómo está dispuesto a intervenir el país en esta área?

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