Al despuntar el nuevo siglo se vislumbra con mayores definiciones la aparición de una nueva organización de la vida económica, en la que el conocimiento adquiere una diferente dimensión en la nueva división geopolítica y socio-técnica de los procesos de producción, distribución y consumo de las mercancías.Esta nueva dimensión del conocimiento ha producido cambios en los fines y el papel conferido a la educación y a las universidades.Consecuentemente, alumnos y profesores son convocados a modificar las tareas que tradicionalmente les han sido propias, pero también a la administración de estas instituciones se le plantean nuevos retos para atender grupos sociales de microregiones que históricamente no han sido atendidos por este nivel educativo.De manera reflexiva, se presenta en esta ponencia el caso de las Unidades Académicas de Educación a Distancia de una universidad pública estatal mexicana.

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