El artículo trata del proceso de desarrollo de América Latina, identificando un primer momento de desarrollo sin democracia y un segundo momento de democracia sin desarrollo. En el primer momento, el proceso de industrialización substitutiva de importaciones se hace bajo la conducción de Estados autoritarios, sustentados por un pacto de clases y fracciones heterogéneas, cimentado por la ideología nacionalista y el imaginario del progreso. Sin embargo, la inclusión de los trabajadores se hace de forma fragmentada y excluyente, permitiendo la combinación de crecimiento económico con la preservación de las desigualdades sociales.El derrumbe del pacto corporativo en un contexto de economía globalizada tiene como consecuencia la convivencia de la democracia con un conjunto de paradojas que generan un permanente déficit de gobernabilidad.La profundización de la democracia en la región requiere de una nueva comprensión de la ciudadanía y un modelo de democracia deliberativa que permitan la inclusión social y el desarrollo.Por ende, el articulo define como criterio de análisis y evaluación de las políticas sociales, la integración, la participación y la redistribución. Basándose en la experiencia de las políticas sociales innovadoras - que atienden a los criterios mencionados - el articulo termina con un conjunto de recomendaciones.

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