El contexto en el que se presenta el análisis de la condición juvenil en Latinoamérica contiene las características de sociedades de industrialización heterogénea, desigual, que no lograron los beneficios del Estado de Bienestar pero que, a su vez, tienen que enfrentar las contradicciones y paradojas de la globalización.Los cambios societales son extensos y difíciles de resumir, pero enfatizamos: a.) la precarización e inestabilidad del empleo, b.) la tendencia creciente de afirmación de las identidades propias en la región y la consecuente necesidad de reconocer la multiculturalidad, y c.) la desafección política de los ciudadanos ante la crisis del Estado, la democracia representativa y los partidos.Este panorama, general para toda la población latinoamericana, adquiere particularidades en la población joven, diferenciada a su vez por factores tales como el género o su pertenencia al ámbito rural o urbano, a determinada clase social, etnia, región geográfica al interior de su propio país.Esto nos lleva, antes que caracterizar a la juventud como un grupo etáreo homogéneo, a hablar de "juventudes" y analizar los procesos tendenciales en los cuales podrían ubicarse políticas públicas ciudadanizantes que permitan construir las capacidades y estructuras de oportunidades precisas para que los jóvenes se conviertan en sujetos de sus propias políticas.

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